Competitividad fiscal y menos burocracia para localizar empresas

19 de noviembre de 2021. El presidente de la Asociación Gallega de la Empresa Familiar, Víctor Nogueira, desgranó ayer los cuatro retos para que las empresas familiares gallegas ganen competitividad y peso industrial: menos carga fiscal, más tamaño empresarial, eliminar trabas burocráticas para crear e instalar empresas e incentivar las inversiones en la comunidad.

“Necesitamos una mayor competitividad fiscal en Galicia para retener a las empresas y patrimonios, evitar deslocalizaciones y atraer inversión”, señaló Nogueira en la clausura de la asamblea de socios de la Asociación de Empresarios de San Cibrao (Ourense), en la que fue introducido por su presidente, José Antonio Rodríguez Araujo.

Galicia es la décima comunidad autónoma en competitividad fiscal en concepto de impuesto de sucesiones y donaciones, y ocupa el decimocuarto lugar entre las regiones europeas con mayor carga impositiva en impuesto de patrimonio. Así lo recoge un reciente estudio de la Asociación Gallega de la Empresa Familiar. “España es el único país que mantiene un impuesto sobre el patrimonio, a excepción de Países Bajos, que no tiene carga por ganancias patrimoniales, y Noruega y Suiza, donde sustituye a otros impuestos. Países donde el impuesto sobre el patrimonio ha sido históricamente importante, como Francia o Suecia, lo han eliminado”, destacó el presidente de la entidad.

Nogueira puso en valor el papel de las empresas familiares, el 92,4% del tejido empresarial de Galicia, como sostenedoras del empleo: desde febrero de 2020, los puestos de trabajo en la comunidad han crecido el doble que en el conjunto de España, que cuenta con cuatro puntos menos de compañías de propiedad familiar.

El estudio elaborado por la Asociación Galega da Empresa Familiar revela que Galicia tiene por delante nueve autonomías más competitivas en los tipos del impuesto de sucesiones y donaciones, la carga fiscal que más influye en las decisiones para localizar empresas.