“Galicia tiene algunas de las ‘family offices’ más relevantes del mundo”

2 de marzo de 2021. El modelo de family office se encuentra al alza, y la comunidad gallega no es una excepción, a pesar de que su número de plataformas de inversión de este tipo todavía no es muy elevado. “Galicia tiene algunas de las family office más relevantes del mundo, aunque tenga pocas”, señaló Fernando Vázquez, socio responsable de Empresa Familiar de Deloitte España, durante su participación en el coloquio digital Family Office, patrimonio familiar vs. patrimonio y proyecto empresarial, organizado por la consultora y la Asociación Gallega de la Empresa Familiar y presentado y conducido por su presidente, Víctor Nogueira, y directora, Margarita Hermo.

Vázquez presentó los resultados del estudio Family Office en la Península Ibérica, que reflejan que Galicia es la segunda comunidad española, por detrás de Cataluña, con mayor proporción de family offices: el 15%, frente al 42% de la comunidad catalana. En cuanto a las características generales de estas plataformas de inversión en España, están mayoritariamente dirigidas por empresarios de segunda generación y 6 de cada 10 cuentan con un protocolo familiar. En cuanto a las inversiones, se gestionan con 150 millones de euros, con una concentración de activos principalmente en el sector inmobiliario, o real state, y muy especialmente en proyectos comerciales, como oficinas, logística, hoteles y retail.

“El interés en el ámbito científico sobre la family office ha aumentado mucho. Si observamos la evolución del uso del término en las principales publicaciones de negocios en la última década, vemos una clara tendencia creciente en el tiempo: de 1 cita en 2013 a 15 en 2020”,  explicó Berta Rivera, directora de la cátedra de Empresa Familiar de la Universidad de A Coruña, quien destacó que las family offices tienen un papel “fundamental” en el mantenimiento de la misión y de la identidad familiar, facilitando la transmisión generacional y, por lo tanto, la continuidad de la compañía familiar, además de que son “una forma de financiar actividades emprendedoras”.

El coloquio contó con la participación de Alejandro Ormazábal, vicepresidente de la compañía vasca Velatia, de Grupo Ormazábal, que introdujo la family office en 2008 con la filosofía de su fundador, Javier Ormazábal, muy presente. “El grupo tiene ya 53 años, y este es el tercer negocio que mi padre creó. Fue consciente de que, para que el proyecto fuera pasando a las siguientes generaciones, había que dejarle mochila y cantimplora y permitirse cometer errores. Ahora revisamos qué huecos tiene la empresa y en qué hueco puede uno contribuir mejor para aportar lo máximo a la compañía”, relató.